Gentilicio es el adjetivo que indica el origen o nacionalidad de las personas. Algunos gentilicios son espectaculares; a los de Jerusalem, por ejemplo, les dicen jerosolimitanos. A los de Armero, antes de la tragedia, les decían armerunos como espinalunos y coyaimunos, después, armeritas como a los de Moscú a quienes llaman moscovitas.

A los habitantes de los Estados Unidos suelen decirles norteamericanos. Pero los canadienses también lo son. Ellos se llaman a si mismos americans, americanos, gentilicio indebido para una sola nación de América, pues americanos somos todos los habitantes del continente. Es posible que la apropiación del gentilicio continental responda al enunciado del presidente James Monroe, “América para los americanos”. Los mexicanos crearon el despectivo gentilicio “gringo” (green go). Frank Lloyd Wrigth, el destacado arquitecto, propuso que se llamaran usonianos, derivado de USA. No lo aceptaron. Los nacidos o nacionalizados en Estados Unidos son estadounidenses. En prensa, radio y televisión deben usar este gentilicio.