¿IDEOLOGÍAS DEL SIGLO XX?
Alberto Mendoza Morales
Los ecósofos proponen “superar las fracasadas ideologías del siglo XX”. Las hicieron fracasar los titulares del poder al usarlas en beneficio propio. Produjeron el desorden planetario que se prolonga en el inicial siglo XXI, la tempestuosa situación de hambruna, injusticia y guerras de la actualidad. La tragedia es grave en áreas puntuales del planeta. Los tradicionales “ismos”, de derecha y de izquierda, deben se revisados.
Einstein entregó clarificadora reflexión cuando dijo, “los problemas actuales no los podemos resolver con la misma mentalidad que los formó”. Confucio trazó la ruta, “el ser humano superior vive en paz con todos los seres humanos”. Físico y filósofo aportan elevada motivación para actuar con trascendencia futurista. Producir propuestas de transformación compromete a agentes concretos de naciones y sociedades, academias, movimientos cívicos, universidades, sindicatos, iglesias, partidos políticos.
Partidos políticos renovados podrían elevarse frente a las fuerzas destructivas que agitan las naciones. Podrían señalar, en calidad de líderes portadores de nuevos mensajes, líneas preferenciales de acción capaces de resolver la crisis que nos sacude. El desafío les señala doble tarea, convertirse en portadores de nuevas concepciones -dar un ideario- y convocar gentes para aplicarlo. La finalidad es ascender a un nivel superior de conciencia y convivencia.
El proceso de transformación implica: describir correctamente la situación presente, es el punto de partida. Entender lo que sucede en el fondo de la sociedad, es el diagnóstico. Revisar el comportamiento de los titulares del poder históricamente instalados arriba en posición de dominio frente a los de abajo, suscita el propósito de enmienda. Aceptar la responsabilidad de haber ofendido sociedades, es la contrición. Asumir, en consecuencia, una posición “de arriba y de adelante” que sustituya las derechas y las izquierdas. El poder de los pocos que actúan de “arriba hacia abajo”, ponerlo al contrario, de “abajo hacia arriba” y “para todos”. Será la democracia real para alcanzar la paz fundada en lo económico, en la igualdad de oportunidades. Lograremos naciones para alcanzar la excelencia cultural. Serán sociedades que trabajen para la globalización de la economía asociativa, la globalización de la justicia, del bienestar, sobretodo la globalización de la ética. Asoma aquí la real significación del respeto a la diferencia. El conjunto de proposiciones apunta a conquistar en el siglo XXI la alternativa frente a lo que los ecósofos llaman “fracasadas ideologías del siglo XX”.